Pieza fundamental del Departamento Marítimo del Sur creado en 1717 dentro de la política de reconstrucción de la Marina de Guerra española iniciada por la corona tras la Guerra de Sucesión. La Carraca fue el primer establecimiento de este tipo en España para la construcción, reparación y abastecimiento de barcos, que sustituía al Real Carenero. Fue construido bajo el impulso del ministro de Felipe V, José Patiño. El proyecto fue creado por Ignacio Sala y los trabajos se iniciaron entre 1717 y 1720.
Se levantó sobre un lecho de fango lo que dificultó enormemente su construcción. Debe su nombre a que, según se cuenta, la isla pantanosa sobre la que se asienta comenzó a formarse por los sedimentos acumulados alrededor de una carraca encallada. En los trabajos se utilizó a un colectivo de marginados como esclavos moros y turcos, desterrados y vagabundos, que eran la mano de obra gratuita o muy barata para realizar las tareas más duras.
Puede decirse que la construcción del Arsenal de la Carraca se desarrolló durante todo el siglo XVIII. En la primera mitad del siglo XVIII se levanta la cabecera del Arsenal (almacenes, teneduría, obradores, residencias y parte de los muelles). Hacia 1733 se construye la portada principal del Muelle de San Fernando.
En 1752, siendo secretario de Hacienda, Guerra y Marina e Indias el marqués de la Ensenada, se decreta oficialmente su construcción por Real Orden firmada por Fernando VI. Gracias a esta confirmación oficial, durante la década de los años cincuenta las obras se aceleran. Jorge Juan y Barnola planifican importantes modificaciones.
La evolución que sufrieron las obras a lo largo del siglo XVIII hizo que del ideal urbanístico del diseño inicial apenas quedara nada al finalizar el siglo, resultando una distribución final de los edificios según fue necesario cubrir los distintos servicios.
La importancia militar y estratégica de defender La Carraca se incrementó con el traslado da la Isla de León del Departamento Marítimo entre 1769 y 1770 y la concentración en La Isla de la mayor parte de los efectivos de la Armada. Ello fue particularmente destacable durante el asedio francés durante la guerra de la independencia.
Las defensas que protegían la Carraca durante el asedio francés
Ante el asedio francés toda la Isla fue fortificada con un complejo sistema defensivo para evitar la entrada en la Isla de las tropas napoleónicas. Se construyeron baterías para defender el Arsenal, tal como se muestra en el plano adjunto.
La isleta donde ya se asentaba desde 1765 el edificio del Penal de las Cuatro Torres se fortificó antes del asedio napoleónico de las Islas Gaditanas de 1810-1812, dando lugar a la batería de Santa Lucía, uno de los puntos más importantes en la defensa del Arsenal al estar orientado todo su frente al este.
El Arsenal llegó a contar durante el asedio francés de 1810-1812 con seis baterías: la de San Ramón al oeste, la Batería de Dolores al norte, las de San Fernando y de Santa Rosa al este, la de Santa Teresa al sureste y la de San Carlos al sur; que montaban un total de 66 piezas
La isleta donde ya se asentaba desde 1765 el edificio del Penal de las Cuatro Torres se fortificó antes del asedio napoleónico dando lugar a la batería de Santa Lucía, uno de los puntos más importantes en la defensa del Arsenal al estar orientado todo su frente al este.
En los alrededores de la Carraca se levantaron las baterías de San Francisco, de San José, el Águila y el imponente Fuerte de la Máquina. Y más en primera línea las baterías de Velarde y Daóiz
Actualmente de todas estas fortificaciones sólo queda en pie algún pequeño resto perimetral de la antigua posición defensiva de la Batería de Santa Lucía, su polvorín (la Pagoda) y en el exterior el polvorín de la batería de Velarde, conservado por su uso en la industria salinera.
El penal de las Cuatro Torres
En 1765 se había construido el presidio de la Cuatro Torres según un proyecto de Juan Cevada en el islote de Santa Lucía. En él estuvo prisionero don Francisco de Miranda; héroe insigne de la Revolución Francesa, de las independencias americanas y creador de la bandera tricolor de Venezuela. Miranda falleció entre sus muros el 14 de julio de 1816. Al Penal de las Cuatro Torres se le ha seguido dando uso de prisión por parte del ejército hasta hace relativamente poco tiempo.
La prisión fue utilizada durante el franquismo como cárcel para presos políticos y sus alrededores como zona de fusilamientos y posteriores enterramientos en fosas comunes. Recientemente se ha rehabilitado el edificio para que sirviera como hospedaje para la delegación saudí durante su proceso de formación en las nuevas corbetas construidas para Arabia Saudí (no sin polémica) en Navantia en la Carraca.
Torres, castillos y fortalezas 
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