Si hubiéramos seguido la costa para llegar a Chipiona desde Rota, antes de llegar al Castillo objeto de esta entrada, nos encontraremos con el Monasterio o Santuario de Nuestra Señora de Regla. En sus inicios fue una ermita-fortaleza que en 1399 fue donada a los ermitaños de San Agustín los cuales permanecieron allí hasta 1.835, año de la desamortización de Mendizábal. En 1904 se derribó el antiguo templo y se construyó uno enteramente nuevo que quedó concluido en 1909.
Luego toparemos con el Faro de Chipiona, uno de los faros más espectaculares de España, por lo pronto es el más alto con sus 69 metros desde la base y 322 escalones. El Faro de Chipiona fue construido bajo la dirección del ingeniero Jaime Font, que inició los trabajos en abril de 1863.
A menos de 600 metros siguiendo por la costa ya encontramos el Castillo de Chipiona que vamos a visitar.
Historia del Castillo de Chipiona
El territorio de la desembocadura del Guadalquivir fue conquistado por Fernando III a mediados en 1251, si bien la ocupación tras la revuelta mudéjar corresponde a Alfonso X en 1264. Posteriormente Sancho IV concedió a Alonso Pérez de Guzmán «la tierra de la porte que los moros llamaba Chipiona, donde edificó un castillo», según el cronista de la Casa de Niebla Pedro de Medina
Es posible por tanto que el castillo se levantara a finales del siglo XIII o comienzos del XIV. Pero no son pocos los autores que consideran que antes de la conquista existió en el lugar un castillo musulmán tipo ribat similar a los de San Fernando o El Puerto.
En todo caso, lo que es seguro es que al comenzar el siglo XVI la fortaleza estaba en activo y preparada para la defensa frente a las correrías que corsarios y piratas berberiscos realizaban por las costas del sur. Para la defensa se contaba además con la ermita-fortaleza de Regla.
La importancia de la dotación militar en 1.577 era grande para la población existente entonces, 650 vecinos aproximadamente, y lo pequeño del pueblo, constaban de 1 capitán, 1 alférez, 1 sargento, 60 arcabuceros, 27 ballesteros, 3 piqueros, 6 hombres a caballo con lanzas y cuarenta personas más que trabajaban en el campo y que cuando el alcaide del Castillo los necesitaba hacía uso de ellos, en total unas ciento diez personas.
Pero poco a poco con los años la dotación se fue reduciendo hasta no tener ninguna. Consta que para el año 1772 el Castillo de Chipiona ya no contaba con esa guarnición militar alguna. Tan solo un siglo después, en 1893, esta edificación se utilizó durante unos años como puesto provisional de la Guardia Civil.
En 1887 el Castillo fue adquirido por una mujer del pueblo, que decidió rehabilitarlo para convertirlo en un hotel que terminó cerrando sus puertas en 1989
En 1.922 se le hizo una reparación al Castillo debido a la estancia en él durante cinco años de Carlos de Borbón y Luisa de Orleans. Dicha reparación costó 1372,95 pesetas, según las cuentas del Ayuntamiento. María de las Mercedes de Borbón, madre del Rey Juan Carlos I, también residió en nuestro Castillo
Aunque fue declarado BIC en 1985, permaneció diez años abandonado y arruinándose, hasta que terminó siendo expropiad por el Ayuntamiento de Chipiona. En 2000 se pone en marcha un proyecto de rehabilitación que culmina en el 2009 cuando se inaugura. A partir de entonces acoge el Centro de Interpretación ‘Cádiz y el Nuevo Mundo’ y la Oficina Municipal de Turismo.
Centro de Interpretación ‘Cádiz y el Nuevo Mundo’
Integrado en el rehabilitado Castillo de Chipiona, el Centro de Interpretación «Cádiz y el Nuevo Mundo» está dedicado a la relación que tuvo la provincia de Cádiz con el Descubrimiento, la Colonización y la Explotación del Nuevo Mundo: lugar de donde salieron tres de los cuatro viajes colombinos, también punto de partida y llegada de la primera vuelta al mundo.
La exposición muestra un recorrido histórico desde la situación de Cádiz previa al Descubrimiento hasta la promulgación de la Constitución de 1812. En mi opinión merece la pena hacer una visita al castillo y al Centro
Descripción
El castillo apoya su cimentación sobre el firme rocoso natural, estando batido por las olas de mar. Se trata de un castillo de pequeñas dimensiones, de planta cuadrada dividido en dos pisos cubiertos por bóvedas de crucería, con almenado y ventanas ojivales. La altura es de 4,50 m.
La puerta de entrada original se encontraba situada en la cara Norte, protegida por la torre cuadrada que sigue existiendo actualmente y que sobresale sobre los 7,75 m del muro principal. Esta torre tenía en su base un fortín y una campana que tañía en señal de arrebato cuando era necesario. La puerta de entrada actual de la fachada Sur fue construida en el siglo XIX.
Torres, castillos y fortalezas 
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