Un precedente: La torre del Marqués
Entre 1506 y 1507 los moriscos de Almayate huyeron a Berbería y este suceso fue aprovechado por don Íñigo López de Mendoza, conde de Tendilla y marqués de Mondéjar, capitán general del reino de Granada, para pedir a la Corona la cesión de dicho lugar, lo que le fue otorgado el 28 de octubre de 1508. Don Íñigo recibió todas las tierras y casas de los moriscos huidos, aunque no las facultades de que gozaba la Corona, y obtuvo autorización para repoblar el lugar con sesenta nuevos vecinos.

Tendilla decidió construir una pequeña fortificación en la playa de Almayate, que sería llamada Torre del Marqués, pues las huertas cercanas a la costa y el camino de Málaga a Vélez Málaga que por allí transcurría quedaban muy desprotegidos. La obra fue realizada en 1513 en el peñón del Portichuelo.
Pronto empezó su deterioro y la torre fue reparada y ampliada entre 1565 y 1567 por el albañil Juan Díaz, siendo denominada a partir de entonces Castillo del Marqués.
Peo ya en la década de 1730, el castillo se hallaba tan arruinado que fue abandonado, y se propuso que fuera reemplazado por una nueva fortificación construida en sus cercanías. Es lo que propuso el ingeniero Antonio María de Bucarelli en 1762.
El nuevo castillo del Marqués
La Batería o Fuerte del Marqués, también conocido como Valleniza, no fue ubicada en el solar del castillo antiguo, donde quedaron sus ruinas, ya desaparecidas, sino a unos centenares de metros al oeste del mismo, interponiéndose entre la playa y el complejo de las canteras de Almayate.

La construcción del nuevo Castillo del Marqués fue costeada por el capitán Gaspar Álvarez de Sotomayor, a cambio de la concesión del grado de capitán para sus dos hijos, y de la ejecución del proyecto se encargó el arquitecto Antonio Ramos, Maestro Mayor de la Catedral de Málaga. Se siguió el modelo de baterías para cuatro cañones diseñada por el ingeniero José Crame, al igual que otras de la costa como hemos visto. Las obras se iniciaron a comienzos del otoño de 1766 y estaban finalizadas en diciembre de 1767, por lo que su construcción duró un año y algunos meses, ascendiendo su coste a 242.168 reales de vellón con 26 maravedís
El Reglamento promulgado por Carlos III en 1764, contemplaba concentrar en el nuevo Castillo del Marqués una dotación mixta de Caballería, Artillería e Infantería, formada por un oficial, un sargento, dos cabos y dieciséis soldados de Milicia Urbana; un cabo y ocho soldados de Caballería; y un cabo, cuatro soldados y un guarda almacén de Inválidos de Artillería, quedando todo el personal al mando del oficial de Milicia Urbana. La caballería del castillo debía patrullar por el lado de poniente de su costa hasta la Torre de Chilches, última del mando de Málaga, para encontrarse allí con la procedente de la actual Casa Fuerte de Bezmiliana (actual Rincón de la Victoria), mientras que por el lado de levante llegaría a la playa de Vargas, donde coincidiría con los que venían de la Torre del Mar.
El castillo dejó de utilizarse como tal en la década de los años 30 del siglo XIX y fue ocupado por un destacamento del Cuerpo de Carabineros de la Real Hacienda; a partir de entonces, la fortaleza dejó de desempeñar la función defensiva para la que se había construido, convirtiéndose en un inmueble cuya misión era perseguir el contrabando.


En 1913, el director general de Carabineros dispuso la construcción de una caseta de la Comandancia de Carabineros de Málaga. En 1919 se aprobó el proyecto definitivo que contemplaba subir una planta sobre el terrado con objetivo de conseguir doce pabellones que se necesitaban para los carabineros y sus familias. Este proyecto fue redactado por el ingeniero José Cabellos y Díaz de la Guardia, encargándose de la dirección del mismo el ingeniero comandante Francisco Martínez Maldonado. La Caseta de Carabineros del puesto del Marqués, que así se denominó, se ejecutó, y terminada en 1922.
Desde 1938 a 1939, durante la Guerra Civil, esta caseta de carabineros fue utilizada por las fuerzas franquistas como cárcel y pequeño campo de concentración, y en 1940, ya finalizada la contienda, fue ocupada por la Guardia Civil, al desaparecer el Cuerpo de Carabineros, por su lealtad a la República. El edificio, finalmente, fue cedido para uso educativo y en él se encuentran las instalaciones del Ciclo Formativo de Cocina del IES “María Zambrano” de Torre del Mar. La antigua capilla es un aula; el cuartel de Caballería, el bar; las caballerizas han sido transformadas en cocinas; en el patio cubierto el alumnado sirve los menús que se elaboran para hacer prácticas; y la sala del profesorado ocupa la estancia reservada para habitación del oficial. Las intervenciones realizadas para este fin educativo la verdad es que han sido muy agresivas desfigurando la imagen original del fuerte.
Descripción
Se hizo como se ha dicho según el prototipo de Fuerte con Batería para cuatro cañones de a 24, proyectado por el ingeniero director José de Crame, según el cual se construyeron todos los de su especie previstos para la costa del reino de Granada.

Edificio de planta poligonal irregular de ocho lados, presenta su ingreso protegido por un reducto esquinado con adarve y troneras, situándose el ingreso en la parte nordeste. Un pasadizo cubierto por bóveda de medio cañón conduce al patio que da acceso a las distintas dependencias y cuarteles, así como a la escalera que conduce a la planta alta que primitivamente era sólo azotea con parapeto aspillado. El lado meridional es un hornabeque formado por dos medios baluartes que baten flancos y se hallan trabados por una gola o cortina.
Fuerte del Marqués de Valle-Niza – Ficha técnica
Provincia | Málaga |
Municipio | Vélez-Málaga |
Zona/Pedanía | Valle-Niza |
Tipología | Fuerte abaluartado para cuatro cañones |
Fecha de construcción | 1767 |
Proyecto | Ingeniero José Crame |
Obras | Arquitecto Antonio Ramos |
Localización | 36.7205, -4.16115 |