La isla de Ínsua está situada en un paraje extraordinario, en plena desembocadura del río Miño a apenas 200 m. de las extensas e incomparables playas de la costa de Caminha y vigilada al norte por el mítico monte de Santa Trega, ya en la costa gallega, en A Guarda.
La isla ya era conocida por los romanos y posiblemente en la misma hubo un templo dedicado a Saturno, según las fuentes, cuestión no corroborada por testimonios arqueológicos.
Ya en época cristiana, en 1392, la comunidad franciscana de Frades Menores edificó un cenobio dirigido por el fraile Diogo Arias. En esa misma época D. João I ordenó la construcción de un fuerte, pero no queda ningún resto de aquella primera fortificación.
Aquél primitivo convento, tras pasar épocas decaídas, fue reformado y ampliado en 1471, empezando a ser habitado por una notable cantidad de frailes y pasar por una época de prosperidad, hasta el punto de que el Rey Manuel I lo visitó en su peregrinación a Santiago en 1502.
Sobre el fuerte de finales del siglo XIV, en los últimos años del siglo XVI, se realizaron obras para aumentar la eficacia artillera, muy necesaria para hacer frente a los ataques de los corsarios ingleses y franceses. Pese a ello, fue atacado por corsarios ingleses en 1602 y saqueado por piratas luteranos franceses de La Rochelle en 1606. A raíz de estos ataques muchos religiosos abandonaron el convento de modo que, en 1623 éste contaba sólo con 2 frailes, quedando casi sin actividad.
El proyecto de fuerte que hoy podemos contemplar se remonta a la Guerra de la Restauración (1640-1668), construido con el fin de reforzar la línea defensiva que se levantó en la margen izquierda del río Miño y en la costa atlántica para contener los ataques de la armada española. Las obras empezaron en abril de 1649 y concluyeron en 1652, bajo las órdenes del entonces Gobernador de Armas de la Provincia del Minho, D. Diogo de Lima y Brito Nogueira.
A lo largo del siglo XVIII las dependencias del convento y del fuerte fueron reparadas en diversas ocasiones. Durante las Invasiones Francesas la isla fue ocupad< por tropas españolas y francesas. Con la extinción de las órdenes religiosas en 1834 el fuerte fue abandonado por la comunidad religiosa, quedando exclusivamente ocupado por el Ejército. En 1886 se instaló el faro. El último gobernador de la fortaleza fue nombrado en 1909.
En 1910 fue declarado Monumento Nacional, y en la segunda mitad del siglo XX recibió obras de restauración y conservación en varias campañas. En la actualidad existe el proyecto de instalar un Centro de Investigación Avanzada de Áreas Marinas, pero -hasta donde yo sé- no se ha terminado de concretar.

Descripción del fuerte de Ínsua
Fortificación marítima abaluartada, presenta planta estrellada irregular, con 5 baluartes construidos sobre una base saliente de altura variable, que alcanza en algunos puntos hasta 2,80 metros, que funciona como rompeolas de las murallas más expuestas, aquellas orientadas al este y sur.

La fachada principal se encuentra orientada al noreste. En ella se encuentra la entrada que está protegida por un revellín, en que se abren cañoneras estrechas y rectangulares. Interiormente el revellín dispone de rampas de acceso a la terraza de artillería y a la garita que se sitúa en la punta de su esquina. A ambos lados, el revellín está protegido por muros más bajos.
La entrada situada en el frontispicio, de arco completo está coronada por escudos de las armas de Portugal y el del gobernador
En la fachada orientada al suroeste dispone de un balcón rectangular sostenido por ménsulas y cubierta por cúpula esférica.
Los muros de la fortaleza se elevan en talud, recorridos en toda su extensión por una moldura curvada sobre la que se sitúa el parapeto. En las esquinas de los cuatro baluartes mayores se sitúan las garitas, de planta facetada y cubierta por cúpula esférica. Interiormente los muros disponen una amplia plataforma, con pavimento de losas, protegida por un parapeto y con acceso mediante escaleras situadas junto a los cuatro baluartes principales.
La plaza de armas se divide en dos espacios. En el primero se sitúan los cuarteles, almacenes y cocina. En el espacio restante, con algunas paredes comunes a la fortificación, se encuentra el convento, que dispone de iglesia, dormitorios y celdas, claustro y otras dependencias hoy muy arruinadas
La particularidad del Fuerte de Ínsua reside en el hecho de haber sido implantado en un islote, integrando en el espacio intramuros un convento que ya existía anteriormente, formando un conjunto singular. Es de destacar también el pozo de agua dulce situado en el mar, uno de los tres únicos existentes en el mundo.

Otras informaciones
Unas vistas a vuelo de pájaro del fuerte de Ínsua aquí y aquí
Es de acceso libre. Se puede llegar alquilando una embarcación en la Praia da Foz do Minho, que te lleva y te recoge a la hora que le digas. Solo está operativa entre mayo y agosto, y siempre y cuando esté el mar en calma, lo que no siempre ocurre. El “taxista marítimo” es Mário Vasconcelos: 963 416 259