El «Castelo de Ourém» se encuentra estratégicamente situado en el centro del país, en la confluencia de antiguas vías de comunicaciones, en una zona dotada de notable diversidad de recursos naturales esenciales para la supervivencia y fijación de comunidades humanas, como muestran los numerosos testimonios arqueológicos identificados hasta el momento. Destaca en el paisaje, en un lugar de difícil acceso en la cima del monte sobre la ciudad medieval y la ribera de Seiça.

Historia del Castelo de Ourém
Conquistado a los moros de forma definitiva en 1136, D. Afonso Henriques donó Ourém a su hija, la infanta Doña Teresa, quien le concedió foral formando parte de los importantes territorios de las reinas portuguesas. Pero en 1200, reinando Sancho I, regresó a posesión de la Corona.
La antigua fortificación musulmana habría sido reconstruida en los primeros tiempos de la nacionalidad portuguesa, ya que la primera referencia a un castillo de planta triangular en lo alto del monte se remonta a 1178.
El castillo y la villa juegan un papel destacado en la resolución del conflicto entre Sancho II y el infante D. Afonso. Los partidarios del segundo, encabezados por Raimundo Viegas Portocarrero, raptaron a la reina en Ourém que resistió al soberano y obligó a este, humillado, a exiliarse a Toledo, donde falleció en 1248
Bajo el reinado de Fernando I, el termino fue elevado a condado sobre 1370. Para 1384 João I, concede el Condado de Ourém al condestable Nuno Álvares Pereira, por el apoyo dado por el mismo en la guerra de sucesión (1383-1385).
En 1422, Nuno Álvares Pereira donó el condado de Ourém a su nieto, D. Afonso de Portugal que se convirtió en 4.º conde de Ourém. Fu en esos momentos, en el siglo XV, cuando la villa alcanzó su mayor esplendor al establecer D. Afonso su señorío en la misma y promover grandes reformas en el castillo, sobre todo con la construcción a partir de 1440 de un grandioso Paço de notoria influencia arquitectónica italiana.
El terremoto de 1755 causó grandes daños en la villa y en el castillo. A partir de entonces la villa fue abandonada, trasladándose la población a la cercana Aldeia da Cruz, que creció rápidamente recibiendo el nombre de Vila Nova de Ourém en 1841.
Un nuevo destrozo de la fortificación se produjo cuando las tropas napoleónicas ocuparon la villa bajo el mando del mariscal André Masséna en 1810.
Entró en un proceso de degradación durante más de un siglo, hasta que en la década de los treinta del siglo pasado, tras ser clasificado en 1910 como Monumento Nacional, empezaron obras de restauración y valorización que han continuado hasta entrado el siglo XXI.
La actual ciudad de Ourém es la unión de la antigua villa con Vila Nova (anterior Andeia da Cruz) en 1991. El conjunto es propiedad de la Fundación de la Casa de Braganza.
Descripción del conjunto
El recinto comprende tres estructuras principales, alineadas longitudinalmente según un eje NO./SE. y que anteriormente se encontraban interconectadas: el castillo, implantado en el punto más elevado, el pazo en la zona intermedia y las torres-baluarte que formaban parte de la cerca muralla de la villa.

EL CASTILLO: recinto de planta triangular compuesto por tres torres, de planta cuadrangular y rectangular, diferentes entre sí, unidas por paños de muralla. En el interior del recinto se encuentra una cisterna subterránea a la que se accede por escaleras de piedra, observándose y vestigios de muros de otros compartimentos. La cima de la torre NO, de planta rectangular, está coronada por ménsulas de ladrillo en las caras y ménsulas de piedra en las esquinas, abriéndose en la cara O. un vano en arco segmentado. Todavía existen restos del adarve cubierto que conectaba el castillo al Pazo, con dispositivo sifonado de planta oval.
EL PAZO: Presenta planta rectangular sobre la cual se eleva un gran volumen paralelepipédico. Tiene aspecto exterior de caja, acentuado por el reducido número de aberturas en las fachadas E., S. y O. En la fachada N., contrariando ese cierre, cinco ventanales en arco roto, un cuadrangular y otro en arco de vuelta perfecta que se prolonga en túnel bajo el edificio ligandolo a la fachada opuesta.
El Pazo está coronado por una balconada con matacanes, formada por la sucesión de arcos quebrados en ladrillo sostenidos por ménsulas de piedra, que rodea la casi totalidad del edificio, siendo interrumpido en la fachada N. para dar lugar a una franja decorativa de ladrillo con motivos geométricos.
LAS TORRES-BALUARTE: son dos torres de planta poligonal conectadas al adarve de la muralla por puerta en arco roto. La torre E. estaría ligada por un pasadizo al túnel que atraviesa el palacio. Cada una de las torres arranca a diferentes niveles, ya que la torre O. está implantada cerca de dos metros y medios por encima de la torre E. En el exterior, tienen siete en las paredes N. y S. y son escarpadas en la base. La torre E. tiene, en la cara SO, las armas del 4º Conde de Ourém. Ambas torres están rematadas por balconadas, idénticas a los que coronan el edificio del Pazo, que amplían el área de las terrazas. En la cima de cada torre se levanta un cuerpo cuadrangular cubierto con techo de cuatro aguas y cuya puerta tiene una verga denticulada
Al norte del castillo se encuentra el Terreiro de Santiago, en cuyo centro se erige una estatua del Condestable D. Nuno Álvares Pereira, que de aquí habría partido para la histórica batalla de Aljubarrota en 1385.
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